Copa Sevilla

Categorías
Actualidad

La Copa Sevilla alcanzará su 60ª edición en 40 días

El torneo, entre los siete de mayor historia en el mundo, se juega del 3 al 9 de septiembre

  • Estrena categoría 125, incluyéndose entre los 40 eventos más importantes del año
  • Es el undécimo Challenger en España en una campaña récord con 214 acontecimientos

El albero del Real Club de Tenis Betis está listo para acoger la edición número 60º de uno de los ATP Challenger de mayor historia y prestigio en el mundo, la Copa Sevilla.

Será del 3 al 9 de septiembre, cuando la Copa Sevilla celebrará su 32ª edición dentro del ATP Challenger Tour.

El torneo sevillano será el undécimo ATP Challenger en suelo español este año, de los quince existentes -tres en Andalucía- y dentro de un calendario de acontecimientos de rango mundial que la Real Federación Española de Tenis ha llevado hasta los 214 eventos, repartidos por 31 provincias de 16 regiones o ciudades autónomas, entre ATP, WTA, ATP Challenger e ITF femeninos, masculinos, júniores y juveniles, masters (veteranos) y en silla de ruedas.

La Copa Sevilla, que nació en 1963 -originalmente denominado Concurso Internacional Copa Sevilla- y que se adentró en el ATP Challenger Tour en 1991, es, en la actualidad, una de las siete competiciones de mayor y continuada historia en la división Challenger, que conforman centenar y medio de eventos en el mundo.

Además de esos siete clásicos, el torneo que organiza el Real Club de Tenis Betis está dentro de la treintena de eventos (21 en Europa) de categoría 125 (de 175 apenas hay una decena) de este año, siendo Sevilla uno de los dos históricos con tan preciado rango, junto con el alemán de Heilbronn.

Característica esencial de la Copa Sevilla es el equilibrio entre éxito del tenis español y la internacionalidad del acontecimiento. Como muestra más reciente está la final de 2022, con dos anfitriones protagonistas en un torneo que rozó la cifra récord de una treintena de banderas de naciones de América, Asia y Europa.

Desde su origen en 1963, en la Copa Sevilla se han producido victorias de cuarenta y cinco jugadores originarios de quince naciones de cuatro continentes (22 foráneos): Colombia (4), Alemania (3), Argentina (3), Australia (2), Austria, Bélgica, Canadá, Chile, Dinamarca, Francia, Italia, Noruega, Perú, Portugal, y, claro está, de España, con 36 triunfos de 25 jugadores.

Y en los treinta y un años dentro del ATP Challenger Tour, sobre el albero del Real Club de Tenis Betis se han dado 17 triunfos de 14 tenistas españoles y 3 victorias de alemanes (2 de Dirk Dier), 2 de argentinos y 1 de jugadores procedentes de Austria, Bélgica, Canadá, Colombia, Francia, Italia, Noruega, Perú y Portugal.

Así, ya ha habido finalistas procedentes de una veintena de países de los cinco continentes, lo que da buena idea de la pluralidad e internacionalidad de la Copa Sevilla.

Hay que destacar las rachas de los tenistas de casa, copando las finales individuales en las tres últimas ediciones, y otras seis más entre 2000 y 2012; como también los títulos de Pedro Cachín, Casper Ruud, Felix Auger Aliassime y Kimmer Coppejans, entre 2015 y 2018.

Otra de las excelencias del prestigioso Challenger sevillano radica en la proyección de jugadores. Merecen ser recordadas actuaciones como las de Rafa Nadal quien, aprovechando la wild card que le concedió la organización en 2001, logró a los 15 años su primer punto ATP en este torneo. O como los espléndidos primeros cuartos de final Challenger del cadete Carlos Alcaraz, con 16 años, en un memorable partido de madrugada en 2019. Y, por supuesto, las ya mencionadas y tempraneras victorias de Casper Ruud y Félix Auger-Aliassime a sus 17 años.

Esa proyección puede incrementarse en la edición 2023, al tratarse de un torneo de categoría 125, lo que supone un reparto de premios de 145.000 euros (19.650 para el campeón) y la consecución de 125 puntos ATP para el triunfador y 75 para el finalista.

Sumar 125 puntos le supone a un jugador, por ejemplo (al cierre de este comunicado), pasar en la clasificación ATP del puesto 100º al 81º, o del 80º al 53º.

Si atendemos a los antecedentes, el alemán Lars Koslowski, ganador de la primera edición de la Copa Sevilla dentro del ATP Challenger Tour, entonces rondaba el top 100, y después de su triunfo en Sevilla, en los meses siguientes, alcanzó su mejor ranking histórico, 63º del mundo. Y entre las grandes escaladas destacan la de Auger-Aliassime, que ganó en 2017 y subió 58 puestos en el ranking ATP; Coppejans, quien con su triunfó en 2018 ascendió en la lista 80 posiciones; Cachín, que al imponerse en 2015 se aupó 82 plazas; o Ruud, que tras vencer en 2016 subió de golpe 176 posiciones en la clasificación mundial.

Sólo desde que el torneo se integra en el ATP Challenger Tour son 190 los jugadores top 100 que han disputado la Copa Sevilla, entre ellos 53 españoles. De esos 190, 16 han estado entre los 5 mejores del mundo, habiendo sido número uno ATP 6 de ellos: Alcaraz, Nadal, Moyá, Courier, Rafter y Paes (dobles). Y 3 más han sido número dos del ranking ATP: Ruud, Corretja y Norman.

Otros 14 tenistas participantes en Sevilla alcanzaron un puesto entre el sexto y el décimo del mundo, destacando, por ejemplo, Auger-Aliassime, A. Costa, Schwartzman, Bautista, Massu, Carreño o Larsson. Y han sido 59 los deportistas que se han situado entre los puestos 11 y 49 de la clasificación ATP.

En la historia sevillana también brillaron Santana, Davydenko, Puerta, Berasategui, Mantilla, Ferrer, Verdasco y Almagro; saliendo victoriosos Orantes, Couder, Velasco, Roig, Martín, Robredo, Riba, Ramos, Andújar y los hermanos Granollers.

Quienes estrenaron el palmarés sobre la tierra amarilla del Real Club de Tenis Betis fueron el mallorquín José María Alfín -ganador en 1963 y 1964- y el mencionado Lars Koslowski, que se adjudicó la edición inaugural de la Copa Sevilla en el ATP Challenger Tour (1991).