Orantes: “ganar aquí fue importantísimo en mi carrera”
Mini entrevista con el granadino que hizo historia mundial entre 1969 y 1982. Por Goyo Ybort.
Ahora que se cumplen 56 años de la victoria de Manolo Orantes en la cuarta edición de la Copa Sevilla, hemos entrevistado al zurdo andaluz para Match Point.
Orantes fue número 2 del mundo en 1973, justo cuando se estrenó el ranking mundial ATP que lideró Nastase, el 23 de agosto de ese año. Fue top ten mundial hasta octubre de 1978 y top 80 hasta marzo de 1984.
Posee 34 títulos ATP entre 1969 y 1982, destacando el Masters de 1976 (y el de dobles en 1975), el Open USA y Montecarlo en 1975. Fue tres veces campeón del Trofeo Conde de Godó (1969, 1971, 1976) y cuatro veces subcampeón, y alcanzó la final individual de Roland Garros en 1974 y de dobles en 1978, junto a Higueras.
Por parejas ostenta un total de 23 títulos, y disputó 38 eliminatorias de Copa Davis, con 60 partidos ganados (39 en individuales), entre 1967 y 1980. También fue capitán del equipo español de Davis entre 1985 y 1992.
Esta primavera se ha publicado su libro Orantes: de la barraca al podio, la historia de superación del segundo tenista español más premiado, escrito por el periodista Félix Sentmenat Bertrand y con Rafa Nadal como prologuista.
P. ¿Cómo recuerdas tu victoria en la Copa Sevilla de 1966?
R. “Fue el primer torneo grande internacional que gané, ya fuera de lo que eran campeonatos junior y nacionales. Recuerdo que gané a William ‘Pato’ Álvarez en rondas finales, y antes al chileno Pinto, que también fue duro. Ellos tenían 10 o 12 años más que yo y, lógicamente, estaban más metidos en el tenis. Jugué con la Slazenger Challenger nº 1 -con la que también gané el Godó en 1969- (y una de sus tres favoritas de la historia), raquetas que me dejaba inicialmente mi entrenador. Luego, al ser ya campeón de España junior, me las daban oficialmente”.
P. ¿Qué sientes al haber sido el primero de muchos grandes en Sevilla?
R. “Cuando tienes esa edad -16 o 17 años-, tener esa oportunidad contra gente de 23 o 24 años, que se miden habitualmente con los mejores y más fuertes, te da esa ilusión y prosperidad, te da moral en busca del nivel más alto. Me hizo mucha ilusión y lo recuerdo todavía, y guardo el trofeo típico de Sevilla. Son cosas muy importantes en la iniciación, que te dan más moral, y te das cuenta de que ha sido importantísimo en tu carrera”.
P. ¿Qué opinas acerca de que este histórico torneo se celebre sobre una superficie única?
R. “Es bonito, e importante, más en aquella época. Ahora se busca equiparar más las superficies. Se respetaba como era, también el tenis era más amateur. No era una diferencia enorme -respecto a la tierra batida normal- y se jugaba igual. Era un torneo de mucho interés y nos hacía mucha ilusión disputarlo a todos los jugadores, pues era una oportunidad internacional en casa. Teniendo problemas
económicos para desplazarnos fuera, te permitía competir con la gente ya más formada. Hoy en día, para los que no tienen el ranking para acudir a las grandes citas de pista dura en Estados Unidos, es bueno que haya estos torneos, para sus oportunidades de competir, sumar puntos y subir. Lo que me pasó a mí entonces, ganando a jugadores que estaban triunfando fuera, te da expectativas y te lanza, sobre todo a los jóvenes, y en esa época más difícil para poder pagarte viajes largos, se puede perder la mentalidad si no prosperan, y se van bloqueando”.
P. ¿Crees que la Copa Sevilla es una buena propuesta para los jóvenes?
R. “Yo creo que sí, por lo que estaba diciendo antes, al ser joven, sin haber salido, y poderte medir a jugadores formados internacionales, te hace ver que estás en el buen camino, que estás trabajando bien y que hay resultado; esto te da mucha moral y hace que te esfuerces más. Yo creo que serán muchos, incluidos Nadal, los que pensarán así”.
P. ¿Cómo valoras que España tenga programados este año 14 eventos del ATP Challenger Tour? ¿y en qué beneficia a los tenistas españoles?
R. “Lo valoro mucho. Antes, a lo mejor, la federación ayudaba un poco a algunos jugadores; ahora, tener esto y que hay más medios y está todo mejor organizado va muy bien, pues hacen falta estos torneos.
Torneos que también sirven para que destaquen jugadores que, a lo mejor, están sin entrenador, y pueden demostrar que quienes no les siguen están equivocados, ya que abren las puertas a poder competir y exhibir el nivel que tienen, y saber lo que han de hacer, sacrificarse y entrenar para llegar arriba. Aprender a competir contra duros y grandes jugadores contribuye mucho a la óptima y necesaria
mentalidad. Ir a competir con extranjeros de muy buen nivel te lleva a creer en el esfuerzo. Valoro que son los torneos challengers los que dan la oportunidad a los jóvenes para ganar sus primeros puntos, y marcan el camino hacia el tenis profesional”.
P. ¿Y que uno de esos 14 sea la histórica Copa Sevilla?
R. “Eso significa que han hecho mucho por el tenis, han ayudado a que el tenis español esté donde está, que el torneo pueda ir creciendo, aumente su categoría, que ayude a los jugadores y motive a los profesionales, que se sientan bien y con proyección. Las federaciones han de valorar la tarea de los que siempre han contribuido, y han de tener un premio, como es el caso de la Copa Sevilla”.
P. ¿Por qué te reconforta especialmente la publicación de tu libro?
R. “Me reconforta un poco porque ahora hay mucha más gente que me ve y me pregunta sobre lo que hice y se ha publicado, sobre ser el segundo que más partidos ha ganado, sobre mis victorias fuera, tanto en individual y dobles. Me hace más ilusión. Antes te conocían, pero no sabían todo sobre tus inicios; eso es lo que me hace ilusión, y es lo que se suele hacer con todos los deportistas. Estos conocimientos aportan también a los jóvenes, conduciéndoles hacia una mentalidad positiva, hay que contar la historia de cada uno, lo que has aportado y cómo te has formado. En el extranjero lo valoran mucho más, en muchos sentidos, por eso es bueno que se sepa el desarrollo de cada deportista con historia. Es una satisfacción”.